miércoles, 13 de noviembre de 2019

Déjà vu, horrible déjà vu

La década del 90 fue mi década de los 20 a los 30. Es decir, pertenezco a una generación nacida en dictadura, criada en democracia, y azotada en la primera juventud por el segundo período neoliberal. Ni mejores ni peores que las generaciones siguientes. Ya lo decía Miguel Grinberg en alguna nota de alguna vieja CantaRock, "cada generación tiene su porcentaje de estúpidos". Ni mejores ni peores, entonces, sólo más viejos.
Pero el detalle generacional no es tan detalle, sino más bien constitutivo de nuestra subjetividad colectiva. Por eso, desde la campaña presidencial de 2015 (e incluso desde antes) sabíamos lo que ocurriría si (como finalmente pasó) Macri y su runfla neoliberal llegaban a imponerse. Insisto, ni más vivos ni más idiotas, simplemente más viejos.
La persistencia de la memoria es el acertado título del Vol III de Güacho, editado en 2017. Ahí está la canción de hoy, La guerra grande.
"Tu mente ya escuchó esa música una vez. Presiente la derrota y todo lo que vas a doler".


sábado, 9 de noviembre de 2019

Macri basura

"En un año han reducido ustedes el salario real de los trabajadores al 40%, disminuido su participación en el ingreso nacional al 30%, elevado de 6 a 18 horas la jornada de labor que necesita un obrero para pagar la canasta familiar, resucitando así formas de trabajo forzado que no persisten ni en los últimos reductos coloniales.
Congelando salarios a culatazos mientras los precios suben en las puntas de las bayonetas, aboliendo toda forma de reclamación colectiva, prohibiendo asambleas y comisiones internas, alargando horarios, elevando la desocupación al récord del 9% (...)
Tampoco en las metas abstractas de la economía, a las que suelen llamar «el país», han sido ustedes más afortunados. Un descenso del producto bruto que orilla el 3%, una deuda exterior que alcanza a 600 dólares por habitante, una inflación anual del 400%, un aumento del circulante que en solo una semana de diciembre llegó al 9%, una baja del 13% en la inversión externa constituyen también marcas mundiales, raro fruto de la fría deliberación y la cruda inepcia."
Rodolfo Walsh, en la Carta abierta de un escritor a la Junta Militar, 24 de marzo de 1977.

Desde el inicio de este gobierno de mierda que ya se va se coreó una consigna: "Macri, basura, vos sos la dictadura". Lamentablemente, debemos reconocer que no. Más allá de las gambetas que hicieron a la institucionalidad (esa que tanto se jactan de defender), esta runfla ganó en las urnas, y eso es suficiente para distinguirlo de la última dicatadura cívico-eclesiástica-militar. Sin embargo, algunos datos que nos dejó Walsh nos pueden servir para una comparación resumida, de trazo grueso y apenas aproximada.
El salario real de los trabajadores del sector privado se redujo en un 22 % según esta publicación. En el caso de los estatales, la pérdida ronda el 30 % según esta otra publicación.
La participación de los trabajadores en el PBI bajó 6 % (de 54 a 48), mientras que el producto se redujo en un 2%, según esta publicación.
La desocupación llega ya al 10,6 % (Walsh consideraba un record aquel 9 %) según esta publicación.
La frutilla del asqueroso postre que nos vuelve a servir el proyecto neoliberal es el endeudamiento. Cada habitante debe 10 veces más de lo que señalaba Walsh en su carta, alcanzando los 6310 dólares.

Este recorrido imperfecto nos deposita en la canción que hoy comparto. Hojas de plata está en el disco La razón de las almas, de Ave tierra, y sus dos últimas estrofas adquieren sentido a la luz de algunas comparaciones:

Los cuadros que ya no están
llenando huecos,
volvieron quemando fuegos,
son tan parecidos...

...a hombres de plata.
Sonidos descubre al fin.
Los hombres de plata,
me dejan triste al mirar.

Macri, basura, no serás la dictadura pero sos tan, pero tan parecido...


viernes, 8 de noviembre de 2019

Asco

Lunes 23 de noviembre de 2015. Me levanté y fui directo al baño. El vómito salió como expresión íntima y visceral de una sospecha que pronto se confirmaría: un gobierno de mierda nos volvería a hundir en deudas, empobrecimiento y represión. Durante los meses que siguieron, dos o tres veces a la semana, el vómito se hizo recurrente. Por eso, cuando finalmente Lucas Finocchi publicó su disco La velocidad, hubo un tema que representó casi con exactitud eso a lo que yo no le podía poner palabras. Acompañado de la potente vos de Cam Bezkin, habla del asco macerado. ¿Cómo pudimos equivocarnos tanto?